A las chicas les encanta jugar con sus coños, metiendo en ellos diferentes juguetes, medios improvisados. Y con el tiempo quieren ensanchar más y más sus bolsillos, y meterse más y más. A los hombres les gusta esto de mimar a las mujeres, así que estimulamos su interés en ello. Y cuando el perro no está cerca - su novia favorita puede ayudar. El coño hambriento está listo para devorar no sólo dos dedos, sino también una mano entera. Este espectáculo es como una hipnosis para el cerebro: te corres en él con cada arruga. ¡Lo que hacen estas rubias es simplemente hermoso!
La chica decidió enseñar ruso a sus compañeros. Bien por ella. ¿Cuál es la mejor manera de hacer que las palabras sean memorables? Nuestros pollitos tienen una manera: mostrarlas en sus propios cuerpos. Woo-ha-ha, por eso los extranjeros conocen bien nuestras palabras: ¡la motivación es genial!